El
cierre de la Quincena por la Libertad el 4 de Julio en la Basílica del
Santuario Nacional de la Inmaculada Concepción en Washington, atrajo a una
multitud, a pesar del día feriado, el extremo calor y el estado de emergencia
en el Distrito de Columbia debido apagones masivos por tormentas, lo que
sorprendió a organizadores.
Sospeché
que la situación se encaminaba en esa dirección cuando llegue 40 minutos antes
y no pude encontrar espacios para estacionar legalmente en el campus de la
Universidad Católica de América, donde la basílica esta situada.
En la
iglesia, la multitud era poco común, tan densa que la procesión de obispos y
sacerdotes al principiar y terminar la misa no podía seguir su ruta acostumbrada
a un costado y por el centro, sino que tuvo que ser guiada en el exterior a
pesar del sofocante calor. Eso fue
genial para las personas que no lograron ingresar a la basílica y se
encontraban en el graderío.
El
Santuario tiene capacidad para 3,500 personas y unas 5,000 lograron situarse en
el interior con espacio solo para estar de pie.
La congregación de personas excedió fácilmente a la multitud que asistió
cuando el Papa Benedicto XVI la visitó en el 2008, porque el Servicio Secreto
encargado de su seguridad no permitió lo que ocurrió el 4 de Julio: pasillos
bloqueados con gente sentados por todas partes, hasta en el piso.
El
entusiasmo fue grande y la multitud irrumpió en aplausos varias veces durante
la Misa esa tarde. La gente respondió
con aplausos durante la bienvenida del Cardenal de Washington Donald Wuerl y la
homilía del Arzobispo de Philadelphia Charles Chaput, OFM Cap. Ovaciones ocurren
ocasionalmente durante las misas, pero esta fue fuera de lo común.
“Inusual”
fue como se caracterizó la misa completa, especialmente cuando el Arzobispo
William Lori de Baltimore, quien concelebró la misa, exhortó a la congregación
a sacar sus teléfonos celulares y enviar la palabra “libertad” o “freedom” al
377377, como parte de la campaña de mensajes de textos por la libertad
religiosa, y en un par de minutos unas 2,500 personas se unieron al
esfuerzo. (Quienes deseen
actualizaciones sobre la libertad religiosa aún pueden enviar la palabra
“libertad” o “freedom” por mensaje de texto al 377377.
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